Una última mirada atrás
Una última mirada atrás Han pasado muchos días, miles de horas, millones de minutos, cada uno de ellos pasaron juntos, vagos a la realidad pero siempre presentes entre los recuerdos ausentes de una sociedad que despide un año más. Para comprender un poco más en nuestro país y en varios países de Latino-américa está muy bien implantado un modelo de despedida del año muy tradicional, donde las familias elaboran un muñeco que representa todo aquello que se deja atrás de despedida del año viejo, luego se lo quema a media noche y se olvidan de todo lo pasado, aunque siempre se ve por las calles a las personas corriendo con sus maletas o comiendo doce uvas, sin duda son como pequeños rituales que les darán fuerza y motivación. Si bien la costumbre de quemar el muñeco llego con los europeos pues esto vendría más a ser una fiesta pagana que se fue formalizando con el pasar de los años y que llego a convertirse en una tradición. Sin duda la idea es que antes de despedir el año